Con la entrada donde exponía de manera somera como funciona la teoría keynesiana, vamos a aplicarla al caso de España a día de hoy (agosto 2015).
Actualmente existe un 22% de paro, inflación rondando el 0% y deuda pública rondando el 100%. Según Keynes, debemos aumentar la Demanda Agregada para crear empleo y subir la inflación.
En esta situación, tenemos dos ámbitos de actuación con cuatro grandes palancas:
Política monetaria: Reducir el tipo de cambio para aumentar las exportaciones y reducir el tipo de interés para aumentar las inversiones.
Política Fiscal: Reducir los impuestos para aumentar el consumo y aumentar el gasto público para incentivar el consumo.
Una consideración importante, España, como todos sabemos, tiene como moneda el Euro que esta gestionado por el Banco Central Europeo. Eso significa que la política monetaria es controlado por el BCE y el gobierno no tiene palancas para manejarlas.
Sobre la política fiscal, una deuda del 100% ya se hace inmanejable teniendo un volumen excesivamente grande. Además, los tratados europeos fijan un maximo del 60%. Es decir, no debemos endeudarnos más, lo cual, deja fuera aumentar el gasto público.
Solo quedaría bajar impuestos. Esto puede producir un mayor déficit y mas deuda pública. Se podría hacer siempre que los mayores ingresos fiscales producidos por el aumento de lo consumo compensen la reducción de impuestos.
Es decir, desde el punto de vista Keynesiano, el gobierno Español tiene poca capacidad de actuación y está en manos del BCE. Es el BCE con sus políticas expansivas (tipo de interés y tipo de cambio) las que están impactando en el desempleo y el aumento de la inflación.
Dicho todo esto, baja el paro. ¿Motivo? En el próximo post de opinión…