No hay que saber de bolsa para entender el gráfico. El Deutsche Bank, el buque insignia de los bancos alemanes y el más sistémico del mundo, está en mínimos históricos. Si, desde el 2007 se ha dejado un 90% de cotización, es decir, desde 100€ a 10€ y sigue cayendo. Probablemente lo veamos cerca de 9€ o incluso por debajo en los próximos días, lastrando todas las bolsas mundiales.
Claro, pensaras, todos los bancos han perdido mucha cotización. Por ejemplo BBVA ha perdido desde 20€ a 5€ por acción, que no siendo un banco equiparable en tamaño si puede servirnos para poder compararlo.
La banca es un sector donde la confianza de los inversores y clientes es vital para su funcionamiento y, sin saber de bolsa o de banca, parece evidente que algo pasa. Al menos los inversores están saliendo del activo. Pero hace unos días, además, varios bancos de inversión están cerrando posiciones en sus productos de derivados.
Ahora bien, si no soy cliente ni accionista del DB, ¿tengo algo que temer? Por desgracia, si.
Primero recordar la caída de Lehman Brother como secó el crédito interbancario y sus efectos en España. Aquí lo “intentaba” explicar: (https://www.pedrobarqueroblog.es/2015/12/un-poco-de-historia-de-la-crisis.html)
Durante los rescates bancarios europeos, Alemania descartó que existiese un problema con los propios, incluso su gobierno intervino de manera directa para asegurar sus inversiones en deuda pública de los paises con problemas, por ejemplo Grecia, Portugal y España. Realmente transfirió el riesgo de esos créditos a los Estados.
Sin embargo, nos hemos olvidado del motivo principal de la crisis actual, los niveles de riesgos asumidos por el sector financiero que fueron distribuidos en paquetes difícilmente medible bajo una regulación laxa. Y nos encontramos ahora con un grandísimo banco, dentro de la zona Euro, que tiene un nivel de riesgo que es difícilmente cuantificable.
Ya en Estados Unidos se abrió investigación por errores deliberados en la evaluación de riesgo y condenado a una multa que oscilará entre 3.000 y 12.000 millones de Euros que, aunque pueda parecer mucho, tiene casi ese importe provisionado para multas.
Es decir, nos encontramos con un banco que está perdiendo la confianza de los inversores y clientes (parte de la banca de inversión). Con un nivel de riesgo difícilmente cuantificable y una demostrada manipulación de estas posiciones. Y si no era suficiente, el que está catalogado como el que mayor riesgo tiene para lo mercados financieros mundiales y, como consecuencia, con capacidad de barrer de liquidez del mercado interbancario.
Y aunque en un entorno normal, es probable que no tenga riesgos de quiebra, las inestabilidad económica global puede llevar a ser necesario rescatarlo ante algún evento extraordinario, fenómenos que cada vez son más habituales en la economía mundial. Y por mucho que diga la señora Merkel, no le quedará otra que capitalizarlo con fondos públicos o avales y volver a convertir los errores en la gestión privada de alto riesgo en deuda pública para asegurar los depositantes.
Y en ese momento, porque creo que llegará, uniremos Volkswagen y Deutsche Bank y nos daremos cuenta que la sobreprotección que se produce en Alemania a sus empresas, nos perjudica a todos.